Boca juniors - huracán

Sin embargo, la jugada fue anulada porque se encontraba en offside. Primero lo tuvo Frank Fabra y luego Valentín Barco: entre el arquero, el palo y el travesaño le negaron el gol al Xeneize. En un mano a mano inmejorable, el colombiano decidió patear: de la salvada de Lucas Chaves a una acción que generó debate. El arquero puso el pie justo para mantener su valla invicta y la pelota pegó en el palo.

En el rebote, Valentín Barco dominó con comodidad y prefirió rematar: travesaño, pique polémico y despeje. Enseguida, los futbolistas de Boca reclamaron vehementemente que la pelota había ingresado, pero una repetición demostró que había picado justo en la línea y que no había sido gol. En un partido complicado para ambos, ninguno puede controlar el juego y crean pocas situaciones de gol. El futbolista local quedó tendido en el piso e, inmediatamente, todos sus compañeros y los hinchas pidieron penal.